domingo, 28 de noviembre de 2010

Noticias de turismo rural


La crisis no frena el imparable crecimiento de casas rurales
Construcción de un alojamiento rural en la provincia de Valladolid. | JM Lostau

El ritmo de apertura de un establecimiento al día de media se mantiene
Los viajeros aumentaron un 4% el último año
Escasos casos de cierre dentro del sector
Esther Neila | Valladolid
Actualizado sábado 27/11/2010 10:50 horasDisminuye el tamaño del texto Aumenta el tamaño del texto Comentarios 1
La entrada del nuevo siglo trajo el 'efecto 3.000' al turismo rural de Castilla y León. Es el número de alojamientos alumbrados en este tiempo en las nueve provincias. Juntos añaden más de 25.500 plazas a esta creciente y joven oferta turística. Creciente, porque aumenta a razón de 300 establecimientos nuevos anuales, de media. Y joven, porque el 80% de las casas rurales existentes no acumulan más de diez años de vida.

Un vistazo a la estadística de la última década basta para comprobar el crecimiento en un sector que no se ha visto achantado por una supuesta saturación en la oferta. Ni tampoco, en los últimos años, por la crisis económica que aprieta los bolsillos, bloquea los créditos y aparca las inversiones. Ya sean las vacas gordas o flacas, el turismo rural incorpora casi 300 nuevas empresas cada año. En los nueve primeros meses de 2010, 242 nuevos alojamientos nacieron en la Comunidad.

Esos datos, los oficiales de la Junta de Castilla y León, son matizados por la asociación de alojamientos rurales de Castilla y León Acaltur. Estima su presidente, Luis Rodríguez, que el 15 ó el 20% de las casas que figuran en el registro "están cerradas o funcionan en precario". La ausencia de inspecciones, en su opinión, ha engrosado a lo largo de los años una lista que, aun siendo muy amplia, debería recoger únicamente a aquellos establecimientos que cumplen la normativa.

Esta falta de vigilancia es una de las correcciones que incorpora la Ley de Turismo aprobada, precisamente este miércoles, en las Cortes. El texto normativo refuerza la acción inspectora (y la sancionadora, con multas de hasta 90.000 euros), para perseguir los abusos y ausencias de los promotores rurales. "Cuando sea operativa", explica Rosa Urbón, directora general de Turismo de la Junta, tanto "las nuevas clasificaciones" establecidas en la Ley como "las inspecciones continuas que realizan los servicios de inspección" servirán para "depurar esas irregularidades". La nueva norma, continúa Urbón, "endurece las sanciones de la actividad turística" para luchar "contra la competencia desleal".

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